“Me acordé en la noche de tu nombre, oh Dios, y guardé tu ley. Estas bendiciones tuve porque guardé tus mandamientos.” Salmos 119:55-56
Ayer estaba leyendo lo mucho que repercuten los últimos 5 minutos antes de dormir. Este estudio científico afirma que lo primero que sucede es que el inconsciente se queda trabajando con aquel material que produjimos en nuestra mente esos cinco minutos antes de dormir. Si lo último que pensaste fue en los problemas que tienes el cuerpo entero no descansa y no relaja los músculos precisamente porque el inconsciente se queda trabajando con los problemas. Sin embargo si lo último que piensas (Aún cuando tengas problemas serios) son cosas que te relajan, entonces puedes descansar a pesar de la situación que estés atravesando. Pero eso no es todo, también impactará al despertarte, porque tu cuerpo estará preparado para afrontar el día.
Por eso es muy importante que los últimos momentos antes de dormir los apliques en pensar en Dios. El autor de este salmo lo dijo poéticamente: “Me acordé en la noche de tu nombre” Dios tiene mas de 365 nombres que podemos encontrar en la Biblia. Y cada uno de ellos, el puro nombre es una bendición.
Por mencionar algunos:
Dios Sanador
Dios Proveedor
Dios Estandarte
Dios Consolador
Dios Maravilloso
Dios Creador
Dios Guerrero
Dios Escudo
Esta es una de las razones por las cuales invito a todo mundo a leer la Biblia, ¡por los grandes tesoros que se encuentran en ella!
Todos pasamos por situaciones que nos consumen, en las que todo el tiempo tenemos la mente ocupada o preocupada en dichos problemas, pero hagamos caso de este salmo y dejemos que los últimos minutos antes de dormir sean para tu Papá, piensa en Él, seguro que hay un nombre que te consuela y te guía.
Un buen ejercicio es que mientras vas leyendo la Biblia anotes los nombres de Dios que vayas encontrando, para que cuando pienses en Él, conozcas sus nombre y lo mucho que ese simple hecho te puede bendecir.
Armando Carrasco Z