“Príncipes también se sentaron y hablaron contra mí; Mas tu siervo meditaba en tus estatutos, pues tus testimonios son mis delicias y mis consejeros.” Salmos 119: 23-24
A veces todo está en nuestra contra, inclusive todos están en nuestra contra, hasta gente importante. En esta parte del salmo que estamos estudiando “príncipe” se puede referir a alguien importante en la sociedad, alguien “de abolengo” de “buena clase”, pero también nos refiere a alguien que tiene poder político, económico y social. Alguien que puede hacernos daño más allá de hablar “mal de nosotros”, que puede pagar para hacernos daño.
Cuando dice “se sentaron y hablaron” es una expresión que implica planeación, en otras palabras se puede decir así: “Hay gente de poder que se detuvo a planear y hablar en contra mía”. A veces en nuestra vida tenemos a alguien en contra de nosotros, por las razones que sean, pero sucede.
Es entonces que debemos hacer lo que hizo el rey David; meditar en Su Palabra. Por la poderosa razón que en ella se encuentra el consejo. En la Palabra podemos encontrar cómo vamos a salir de nuestros problemas, cómo afrontar la situación. La Biblia tiene el consejo para salir delante de todos los planes que están en nuestra contra.
A veces no nos aconseja como nosotros quisiéramos, porque estamos acostumbrados a pedir consejo queriendo escuchar lo que nosotros queremos hacer, en el caso de Dios, a veces su consejo es diferente al que quisiéramos. Si alguien nos está acosando y amenazando quisiéramos que Dios nos aconsejara que lo mandemos a golpear o que lo demandemos, y cuando Dios nos habla para darnos consejo escuchamos algo que refleja el carácter de Dios.
El caso es que la Biblia tiene en su contenido miles de consejos para nuestra vida diaria, incluyendo consejos para actuar en situaciones en las que gente importante y con influencias nos persigue. La Biblia no es un libro de cuestiones místicas y misteriosas, la Biblia es un libro de consejos prácticos para esta vida, como lo hemos dicho es el manual operativo del hombre.
Cuando entendemos esto no sólo buscaremos el consejo de Dios a través de Su Palabra sino que nos emociona y conmueve buscar consejo en la Biblia. Lo cual nos da una seguridad que nunca te darían los mejores guardaespaldas.
La próxima vez que tengas un problema, no dudes en buscar consejo en la Biblia, te vas a llevar una agradable sorpresa. Dios tiene un consejo para ti.
Armando Carrasco Z