Cómo vencer la soledad

Introducción: La soledad anda suelta, invade a mucha gente, y la agobia, es un sentimiento profundo que te impide disfrutar de la presencia de otras personas. Es mas puedes estar rodeado de gente pero aún así te sientes solo.

Definición del diccionario: La palabra Soledad tiene tres definiciones básicas:

  • Carencia de compañía.
  • Lugar desierto o no habitado.
  • Pesar y meláncolía que se siente por la ausencia , muerte o pérdida de una persona o cosa.

Versículos clave:

15»Si me aman, obedezcan mis mandamientos.

16Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Abogado Defensor, quien estará con ustedes para siempre.

17Me refiero al Espíritu Santo, quien guía a toda la verdad. El mundo no puede recibirlo porque no lo busca ni lo reconoce; pero ustedes sí lo conocen, porque ahora él vive con ustedes y después estará en ustedes.

18No los abandonaré como a huérfanos; vendré a ustedes.

19Dentro de poco, el mundo no me verá más, pero ustedes sí me verán. Dado que yo vivo, ustedes también vivirán.

20Cuando yo vuelva a la vida, ustedes sabrán que estoy en mi Padre y que ustedes están en mí, y yo, en ustedes.

21Los que aceptan mis mandamientos y los obedecen son los que me aman. Y, porque me aman a mí, mi Padre los amará a ellos. Y yo los amaré y me daré a conocer a cada uno de ellos.

22Judas (no Judas Iscariote, sino el otro discípulo con el mismo nombre) le dijo: —Señor, ¿por qué te darás a conocer solo a nosotros y no al mundo en general?

23Jesús contestó: —Todos los que me aman harán lo que yo diga. Mi Padre los amará, y vendremos para vivir con cada uno de ellos.

24El que no me ama no me obedece. Y recuerden, mis palabras no son mías, lo que les hablo proviene del Padre, quien me envió.

25Les digo estas cosas ahora, mientras todavía estoy con ustedes.

26Sin embargo, cuando el Padre envíe al Abogado Defensor como mi representante —es decir, al Espíritu Santo—, él les enseñará todo y les recordará cada cosa que les he dicho.

27»Les dejo un regalo: paz en la mente y en el corazón. Y la paz que yo doy es un regalo que el mundo no puede dar. Así que no se angustien ni tengan miedo.

28Recuerden lo que les dije: me voy, pero volveré a ustedes. Si de veras me amaran, se alegrarían de que voy al Padre, quien es más importante que yo.

29Les he dicho estas cosas antes de que sucedan para que, cuando sucedan, ustedes crean.

30»No me queda mucho tiempo para hablar con ustedes, porque se acerca el que gobierna este mundo. Él no tiene ningún poder sobre mí,

31pero haré lo que el Padre me manda, para que el mundo sepa que amo al Padre. Vamos, salgamos de aquí. Juan 14:15-31

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“…Por mi parte, yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo…” Mateo 28:2

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“…Pues el Señor, haciendo honor a su nombre, no los abandonará; porque él quiere que ustedes sean su pueblo…” 1 Samuel 12:22

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“…No los voy a dejar huérfanos, volveré para estar con ustedes…” Juan 14:18

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“…Yo estoy contigo; voy a cuidarte por donde quiera que vayas…” Génesis 28:15

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“…Llámame y te responderé, y te anunciaré cosas grandes y misteriosas que tú ignoras…” Jeremías 33:3

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“…No tengas miedo, pues yo estoy contigo; no temas, pues yo soy tu Dios. Yo te doy fuerzas, yo te ayudo, yo te sostengo con mi mano victoriosa…” Isaías 41:10

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Entendiendo mas de la soledad y cómo terminar con ella.

Hay tres niveles de soledad, la soledad física cuando perdemos a un ser querido, la soledad emocional, cuando sentimos que debemos estar con gente y la soledad espiritual, cuando nos sentimos solos aún cuando estamos rodeados de gente. Para todos los niveles hay solución.

La Biblia nos permite conocer que Dios está interesado en nosotros y que sabe de nuestro sentimiento de soledad, sea cual sea el nivel en el que estemos.

Cuando entendemos que Dios no es un Dios que está lejos y que podemos relacionarnos con Él también entendemos que no estamos solos, comprendemos que Dios no solo escucha nuestras palabras sino que nos responde. Eso es maravilloso, saber que siempre está de nuestro lado, aún cuando no lo vemos. Y pasa lo contrario de cuando nos sentimos solo hasta cuando tenemos compañía, nos sentimos acompañados aún cuando estemos solos. Él llena ese espacio en nuestra vida y nos hace sentir que está a nuestro lado. La soledad es un asunto que se resuelve a solas con Él.

Repasar los pasajes bíblicos anteriores y meditarlos y creerlos cambia nuestra forma de ver las cosas y podemos dar ese paso de hablarle a Aquel que siempre ha estado con nosotros. Inclúyelo en tu vida, házlo parte de ti. Platica con Él y aprende a escucharlo. No hay un solo día que no te hable. Somos nosotros los que no nos damos cuenta que Él siempre ha estado y estará con nosotros. Sólo inclúyelo.

Una vez que empiezas o restauras tu relación con Él la soledad mas fuerte que es la espiritual se soluciona, y puedes empezar a vivir tranquilo sabiendo que siempre has estado acompañado y que no hay un solo segundo que estés solo.

Los otros tipos de soledad, encuentran solución cuando Dios mismo viene a consolarte por la pérdida de un familiar o amigo. Y manda recursos para que tu dolor pase pronto y sea liviano.

De la misma manera cuando la soledad es emocional, Dios emplea recursos que te ayudan a superar ese sentimiento que te hace creer que esa soledad es para siempre o que es insoportable.

Dios ha previsto en su Palabra el camino para encontrar solución a la soledad, medita en los versículos expuestos al principio.

3 Consejos concretos: 

  • Relaciónate con Dios. Es el paso mas importante, No veas a Dios como un Dios de adorno o un Dios lejano, acércate a Él y Él se acercará a ti. Inclúyelo en tu vida diaria y disfruta de su comañía. Creéme que Dios no es aburrido.
  • Memoriza tres versículos que te hablen de Su compañía y guardalos en tu corazón y frecuentemente dale gracias por esa compañía maravillos siempre presente.
  • Aprende a caminar sin sentir, sino por creer. A veces no estamos solos pero nos sentimos solos. Cuando decides creer entonces tu mente hace todo el trabajo de estar seguro que aún cuando no veas a Dios ni lo “sientas” Él está allí siempre.

Medita en esto: La soledad se acaba cuando te das cuenta que Dios siempre ha estado contigo.